“El tigrillo no es como lo pintan”. ¡Nueva especie!
Juan Camilo Cepeda Duque, es
Biólogo, Magister en ciencias biológicas de la Universidad de Los Andes; hace
cerca de cuatro años, trabaja en la conservación y el conocimiento del tigrillo
y promueve el proyecto “Conservación del Tigrillo Andino”. Ha escrito muchos
artículos sobre diferentes investigaciones, es de Risaralda y es uno de los
protagonistas de esta investigación, que aclara muchas dudas acerca de estos
pequeños felinos.
Juan Camilo, hizo parte del
grupo de investigadores que lograron descifrar la controversia taxonómica sobre
el complejo tigrinus, resultados que además entregan una nueva especie de
félido para Colombia, el tigrillo nebuloso o Andino, leopardus pardinoides. El
grupo de expertos de Latinoamérica se reunió en torno a resolver las dudas
existentes y al desarrollo del proyecto Tiger Cats Conservation Initiative.
“el complejo tigrinus es un
grupo de especies que se parecen mucho entre sí, a veces cambian de nombre por
ciertas características científicas. Queríamos resolver un poco esa
controversia frente a que especies son las que tenemos de tigrillos
neotropicales aquí en Suramérica”, argumentó el biólogo Juan Camilo Cepeda,
en dialogo con el Magazín Agenda Ambiental.
Antes de este estudio, que fue
publicado por la Revista Nature se tenían relacionadas dos especies: Leopardus
tigrinus y Leopardus guttulus; sin embargo, el grupo de expertos que incluye
especialistas de varios países, concluyó tras las pesquisas, respaldadas en
estudios genéticos, que existen tres grupos distintos, “el grupo pardinoides de los bosques
nubosos del sur de Centroamérica y las cadenas montañosas andinas (tigre
nublado); el grupo tigrinus de las sabanas del Escudo Guayanés y centro/noreste
de Brasil (tigre-gato de sabana); y el grupo guttulus en los bosques de tierras
bajas del dominio del Bosque Atlántico (gato tigre del Bosque Atlántico)”,
anota el articulo científico. (Revista Nature).
Lo que se convirtió en júbilo
por la aclaración, que permite contar con una nueva especie, el Leopardus
pardinoides, también es motivo de gran preocupación, pues la reducción de las
poblaciones de tigrillos es mayor a la que se creía, definitivamente alarmante,
según recalca el estudio “La nueva distribución presentó reducciones
alarmantes desde el rango histórico de −50,4% a −68,2%”.
El sur del país y la nueva
especie
Consultado por el rol del sur de Colombia, en donde es frecuente en las cámaras trampa encontrar registros de tigrillos, el biólogo Juan Camilo Cepeda, aseveró que son claves.
“hay evidencia que apunta que el sur del Colombia es la principal fortaleza para la conservación del leopardus pardinoides, actualmente"
"Las áreas protegidas de mayor extensión territorial en el país, que integran poblaciones que pueden ser viables a largo plazo para la especie, potencialmente, están al sur del país, háblese de Puracé, el Nevado del Huila y otros”.
Recomendaciones de Gobernanza
y políticas de conservación
El biólogo integrante del
grupo de expertos, aseguró que es indispensable trabajar alrededor de esta
especie “es importante que se considere que ahora tenemos un félido mucho más
amenazado de lo que parecía la semana pasada, cuando se creía que se llamaba
leopardus tigrinus y que su distribución era toda Suramérica, y que ahora se
llama Leopardus pardinoides y su distribución comprende el noroccidente de los
Andes y el norte de la depresión del Darién, entre Panamá y Costa Rica. Esto es
todo lo que tenemos de leopardus pardinoides en el planeta”.
Entregó adicionalmente varias recomendaciones generales para fortalecer la conservación del nuevo pequeño felino:
- Trabajar de manera conjunta las entidades de las tres cordilleras y el Macizo Colombiano
- Crear planes de manejo de la especie
- Dar el nombre adecuado a la especie (Leopardus pardinoides)
- Acción gubernamental que vaya más allá de la deforestación y Parques Nacionales Naturales
- Reforzar el monitoreo y capacitar a guardabosques en sistemas departamentales de áreas protegidas
- Capacitar en manejo y tenencia de perros en áreas susceptibles y promover las jornadas de esterilización y vacunación.
- Políticas para la conservación de áreas y la restauración de zonas degradadas o deforestadas.
Como las presiones a la
especie son más fuertes que las evidenciadas, no hay tiempo para celebrar esta
nueva especie, y se requieren acciones inmediatas de conservación con la gente.
“el papel de las comunidades locales es esencial para todo esto, sin ellos no hay conservación de pardinoides” Juan Camilo Cepeda
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